La transparencia en la cadena de suministro busca aumentar la cantidad de información que las empresas ponen a disposición de sus consumidores para que éstos puedan tomar mejores e informadas decisiones respecto a los productos que adquieren y las empresas que apoyan.
La transparencia requiere que las empresas sepan lo que sucede en su cadena de suministro y comuniquen este conocimiento tanto interna como externamente bajo la presión de gobiernos, consumidores, ONG y otras partes interesadas para divulgar más información, y el costo reputacional de no cumplir con estas demandas.
Una razón por la cual el proceso se ha vuelto cada vez más importante es que más consumidores lo están exigiendo.
Los investigadores del MIT descubrieron que los consumidores pueden estar dispuestos a pagar entre un 2 y 10% más por productos de compañías que brinden una mayor transparencia y valoraron la información sobre el tratamiento de los trabajadores en una cadena de suministro de productos y los esfuerzos del vendedor para mejorar las condiciones de trabajo de ellos.
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En todas las industrias, este segmento creciente de consumidores exigentes busca información sobre los ingredientes y materiales de los productos, de dónde provienen y las condiciones en que fueron producidos.
Durante la última década, numerosos escándalos han infligido un daño considerable en la reputación de las empresas. Ejemplos incluyen el trabajo esclavo en la industria pesquera tailandesa, confección de prendas de vestir en China y la deforestación en Malasia e Indonesia.
Las consecuencias han resultado en una serie de nuevas leyes relacionadas con la transparencia cmo la Ley de vigilancia para el trabajo forzado, Ley de Transparencia en las Cadenas de Suministro y Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria, entre muchas otras.
