El Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE), dijo que la economía del país sorprendió a los analistas y volvió al nivel alcanzado en el cuarto trimestre de 2019, antes de ser golpeada por la pandemia.
Sin embargo, segú datos de Folha de Sapo Paulo, dicho crecimiento en los tres primeros meses del año que llegó al 1,2% respecto al trimestre anterior, no se ha experimentado en igual medida entre los distintos sectores.
Es más, las personas que dependen de trabajos menos cualificados, especialmente en el mercado informal, no fueron impactadas por esta mejora.
El sector servicios, que es el que más ocupa, creció un 0,4% y, en éste, el grupo de actividades que incluye alimentación y ocio (entre otras) y que representa uno de cada tres puestos de trabajo en el país sigue estando un 9,5% por debajo del nivel precovid.
Para los economistas, el aumento de los índices no refleja la fragilidad del mercado laboral.
La actividad económica aún no ha recuperado el pico registrado a principios de 2014 y el crecimiento se ha ralentizado en comparación con el último trimestre de 2020.
Aun así, las cifras animaron a los mercados, que pronosticaron un incremento del 0,8%. En comparación con el primer trimestre de 2020, el aumento fue del 1%.
