La Federación Nacional de Minoristas (NRF) publicó su último informe Global Port Tracker que muestra que las importaciones minoristas a través de los principales puertos de contenedores de Estados Unidos disminuyeron año tras año en julio, sólo la tercera caída de este tipo en dos años y la primera desde diciembre de 2021.
Según publica GCaptain, con la inflación continuando y la Reserva Federal esperando enfriar la demanda a través de tasas de interés más altas, se espera que las importaciones minoristas caigan por debajo de los niveles del año pasado para el resto de 2022, según el NRF.
«Los consumidores siguen comprando, pero el aumento de carga que vimos durante los últimos dos años parece estar desacelerándose«, dijo Jonathan Gold, vicepresidente de NRF para la Cadena de Suministro y la Política Aduanera.
Si bien los volúmenes de carga todavía están «sólidamente por encima de los niveles anteriores a la pandemia», la tasa de crecimiento se ha desacelerado e incluso se ha deslizado a números negativos en comparación con los volúmenes inusualmente altos de 2021.
«La clave ahora es lidiar con los problemas en curso de la cadena de suministro en todo el mundo y con las negociaciones laborales en los puertos de la costa oeste y los ferrocarriles de carga. Las operaciones fluidas en los puertos y en los rieles son cruciales a medida que entramos en la ajetreada temporada navideña», agregó Gold.
Las conversaciones laborales entre la Unión Internacional de Estibadores y Almacenes y la Asociación Marítima del Pacífico continúan más allá del vencimiento del último contrato el 1 de julio. Mientras tanto, los ferrocarriles de carga y su sindicato han seguido negociando después de que se publicaran las recomendaciones de la Junta Presidencial de Emergencia designada este verano.
«El número de embarcaciones que esperan atracar en la costa oeste se ha reducido a casi lo normal«, dijo Ben Hackett, fundador de Hackett Associates, que produce el Global Port Tracker en nombre de la NRF. «Pero con el cambio de parte de la carga a la costa este, la congestión y la presión sobre los puertos se ha desplazado a la costa este«.
Finalmente, se dijo que la cadena de suministro interior, particularmente el ferrocarril, continúa enfrentando dificultades que han resultado en el retraso de los contenedores que salen de los puertos, causando congestión en las terminales que afecta la capacidad de los transportistas para descargar su carga.
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