Bancos: ¿acelerador de sueños o mal necesario? por Antonio Poblete Olivares

“Los bancos abusan de la gente” señaló un alumno de Ingeniera Comercial durante la cátedra de Gestión Comercial Bancaria.

Años en el mercado financiero me permitieron responder a su intervención: “Estimado, ser cliente de un banco es algo opcional, es voluntario, si no quieres estar en el sistema, no entras. No obstante es muy importante que consideres los beneficios de operar en el sistema, por ejemplo: una vez que estés trabajando querrás comprar una casa y tienes dos opciones.

La primera es juntar los fondos 20 años y comprar la casa y la segunda es pedir un crédito hipotecario y pagar la casa por 20 años”.

Podemos debatir largamente sobre la banca y su función de proveedor financiero tanto a personas como a las pyme. Muchos automáticamente pensaran en la tasa de interés para definir si es un “abuso” o un “beneficio”, no obstante la mirada debe centrarse en el análisis de riesgo de cada cliente bajo la relación directa de rentabilidad versus riesgo.

Por ejemplo ¿Cuál es la utilidad que genera una inmobiliaria? ¿un 30% anual? ¿y cuál es la utilidad que genera un banco con una inmobiliaria? ¿un 3% anual?. Bajo ese ejemplo hay 2 visiones: 1° el negocio podría hacerlo el banco y en vez del 3% obtener el 30%, pero no es el rubro del banco.

2° si el cliente no paga el crédito otorgado, perderá los intereses que ya pagó, pero el banco además de dejar de percibir los intereses futuros, perderá también el capital otorgado. En Chile y en el mundo el sistema financiero debe ser visto como un socio que toma riesgos y que apoya a personas y empresas en proyectos personales y empresariales.

Los más optimistas hablan de «acelerador de sueños» y los más críticos de «mal necesario», pero la verdad siempre está en alguna parte de estos dos extremos, dependiendo del  contexto y la realidad de cada caso en particular.

Antonio Poblete Olivares, Ingeniero Comercial PUCV; MBA Universidad Federico Santa María. Profesor Escuela Ingeniería Comercial PUCV

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