Álvaro Román de CCU: «La logística debe adaptarse a las necesidades de las ciudades inteligentes»

Incorporar tecnología a las ciudades con el fin de hacerlas más amigables para sus habitantes mediante la automatización de la red eléctrica, eficiencia energética, alumbrado público inteligente, la movilidad eléctrica, entre otras medidas y soluciones son lo que persigue una ciudad inteligente o Smart City.

Por ello en el marco del seminario «El poder de la ciudad» de Do! Smartcity MasContainer, conversó con Álvaro Román, gerente de logística de la empresa CCU.

Álvaro Román de CCU: «La logística debe adaptarse a las necesidades de las ciudades inteligentes». @mascontainer

A su juicio “una ciudad inteligente es una ciudad que tiene personas felices, es el lugar que todo el mundo quisiera estar. Dentro de eso, en empresas como en la que trabajo, más allá de la logística , en los productos de consumos masivos, con marcas valoradas, donde se hace mucho foco en que el consumidor te prefiera, no hay que desconocer la preferencia que tienen los consumidores por vivir en una ciudad, donde hay que llegar con la logística y en eso es un desafío. Llegar en cualquier ciudad, en las condiciones que están es un desafío, si no nos adaptamos a las necesidades de estas ciudades inteligentes vamos a perder consumidores, a perder valor”.

Agrega que “hemos encontrado en este espacio una intersección bastante interesante que hoy se ha ido materializando que es ver a todos los actores, no solo las empresas privadas, también la academia nacional que tiene mucho que estudiar sobre esto y extranjera, tienen la experiencia, modelos que empujan cosas a través de algunas organizaciones mundiales y las soluciones tecnológicas que parece ser el principal objeto que hay que incorporar a las ciudades”, destacó.

En ese sentido señaló que “nosotros vemos una necesidad de hacerlo en conjunto, porque hacerlo por sí solo es muy difícil: es caro, ineficiente querer sumar una tecnología, cambiar tu proceso o cambiar algunas reglas del juego que muchas veces no es posible de hacer si no lo decide la sociedad completa.

Román destacó que “lamentablemente Santiago es el 90% de los desarrollos tecnológicos o de las cosas nuevas y aquí es donde más se ve la electromovilidad, que es una solución desde la perspectiva de muchas cosas que ya vivimos. Nosotros hicimos electromovilidad dentro de nuestros centros de distribución, toda la combustión y todo lo que era fósil lo dejamos, llevamos un buen tiempo trabajando con cosas eléctricas y vemos, no solamente los beneficios de usar una tecnología limpia, sino también de una tecnología que ocupa menos espacio, tiene menos residuos, no ocupa aceite, no emite ruido, hay bastantes cosas”.

El ejecutivo resaltó que “sabíamos que esto iba a agarrar fuerza en Santiago y en las regiones hay una necesidad, cuando uno lo ve por el lado, no solo de la congestión, por el lado contaminación, las ciudades que hoy están más contaminadas, no solamente Santiago, sino que hay algunas que han vivido cuadros de emergencia y pre emergencia en mayor cantidad que Santiago, como es de Talca al sur, incluyendo Coyhaique”.

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“Hay un foco especial con Temuco, Smart City está allá, para nosotros es importante estar ahí porque, quizás, como la ciudad es más pequeña, el municipio es más cercano y podemos articular cosas más rápido de lo que se pueden hacer en Santiago, donde son muchas más comunas, intereses y carencias distintas”, destacó.

Álvaro Román señaló que en materia tecnológica “tenemos que caminar rápido y lo que está haciendo el resto del mundo es digitalizarse, cada día estamos más digitalizados, hay más gente haciendo transacciones electrónicas, teniendo todo sobre una nube. Hay que colaborar entre tantas nubes porque el gran desafío que tenemos es hacer una red social de todo lo que necesitamos para entender bien cómo movilizarnos, cómo diseñar los proyectos; en el caso del gobierno, cómo se diseñan las carreteras, cómo se diseña la ciudad”.

“Entre medio, nosotros tendremos que ir avanzado de una manera inteligente y si es necesario tomar el liderazgo en incorporar nuevas tecnologías, porque tenemos un tamaño importante, movemos muchas veces, no solo la logística,  sino que también las tendencias del uso de algunos equipos, como los eléctricos”, sostuvo.

En cuanto a los desafío que vienen para la empresa CCU, Román señaló que “en los próximos cinco años, de cara al 2030, vamos a tener una logística, no solo la nuestra, sino de toda la industria, mucho más avanzada y colaborativa, con mucho más conciencia, de que no hay que mirar al camión o a la micro como un enemigo, sino que hay que transformarlos en algo centrado en el consumidor y en las personas, y termine siendo un  beneficio para todos y un negocio”.