Xeneta, empresa dedicada a la evaluación comparativa de tarifas de fletes, realizó un estudio estableciendo que las tarifas promedio desde Asia hasta el norte de Europa aumentaron un 2.000% en los últimos cinco años y llegando a unos US$8.300.
Esta alza respecto al diferencial entre las tarifas en el mercado al contado ha alcanzado un nivel sin precedentes, algo que tendrá seguramente amplias implicaciones para los transportistas de contenedores este año 2021.
El director ejecutivo de Xeneta, Patrik Berglund, comentó en un webinar que «En años anteriores, el diferencial entre las tasas de corto plazo más baja y más alta era de alrededor de US$1.000».
Sin embargo, la situación actual «oscila entre US$6.000 y $US11.000 (el diferencial actual). Por su parte, el mercado de contratos a largo plazo estaba comenzando a hacer lo mismo, con tarifas un 150% más altas que hace un año».
Berglund añadió que «los proveedores se están comportando de manera muy diferente con los clientes, y hay una gran diferencia entre lo que logras con los forwarders o con las navieras directo, lo que también dice algo sobre tus volúmenes, en la mayoría de los casos».
Al respecto, Thorsten Diephaus, director de cuentas estratégicas de Xeneta, aconsejó a los embarcadores diciendo que “uno de los mensajes clave para el 2021 es que su presupuesto de licitación en papel no es lo que pagará en realidad, porque la mayoría de las empresas sufrirán cuando aparezcan volúmenes adicionales y el mercado spot sea cuatro veces mayor de lo que contrataron a largo plazo. Por lo tanto, nunca ha sido tan importante como ahora predecir los volúmenes con la mayor precisión posible».
Se enfatizó en que los transportistas que persiguen tasas de mercado spot más altas deben nominar más proveedores para los mismos volúmenes que en el pasado. Por lo tanto, Xeneta advirtió en su estudio que como las rutas secundarios entre el norte de Europa a la costa este de Estados Unidos habían experimentado menos volatilidad, los efectos dominó de Asia-Europa podrían afectar a otras rutas.
Los expertos concluyeron que «lo que es casi increíble de presenciar es que cuanto más difícil es conseguir equipo, cuanto menos capacidad hay disponible y cuanto menos confiables son los viajes de las navieras, más cobran a sus clientes, que ha sido la situación durante los últimos tres o cuatro meses en particular”.
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